Le he pedido que se presente él mismo, porque lo hace como nadie, este es Jorge.
Me piden que me presente, que os cuente acerca de mis inicios. Y tras intentar escaquearme - que hablar de mi me gusta más bien poco - proporcionando mi curriculum, palabras escritas por amigos, etc y no dando resultado la opción de salirse un poco por la tangente ahí van unas breves líneas donde intentaré, si los hados me iluminan, plasmar algo de mi alma y no un suceder de títulos y trabajos. Ahí va:
Nací en Oviedo. De vocación temprana sentí la llamada del teatro desde muy niño, a los 6 o 7 años. Aún hoy recuerdo perfectamente el momento. Tenía aficiones quizá un poco extrañas para una niñez convencional. Pasaba mis horas haciendo figuras de papel, bailando claqué o escribiendo versos que salían de mi cabecita. Pero la maldición de las bruxas había hecho su cometido y ya no habría meiga capaz de revertir los efectos, así que rindiéndome al viento, cual Shaliman, para cabalgar en él, comencé a tomar cursos y a plantarme delante del escenario de la mano de actores de la compañía Teatro del Norte. Seguido vinieron los años en los que forme parte del T.E.U de Oviedo, La Estampa, Forja Teatro, cursos y talleres de expresión corporal, voz, comedia del arte, cortometrajes... Para seguidamente trasladarme a Madrid donde seguir formándome con gente como Paca Ojeda, Pepe Vidal, Arnold Taraborrelli, Alicia Hermida, Iñaki Aierra... y trabajar en televisión, publicidad, cine, teatro, lecturas dramatizadas, etc con la fortuna de que mi trabajo me haya hecho y me siga haciendo viajar tanto geográficamente como por el recorrido de mi propio yo y la imaginación de los personajes que he tenido la suerte de representar.